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Selfi extremo y tenue autoestima

Cuando nos hallamos en una situación de emergencia sanitaria, como ha sido el caso hace recientes momentos, nos centramos en que se trata de la mayor causa de muerte, en nuestra mente desaparecen otro tipo de acciones que pueden llevar a una persona a acabar con su vida. Este es el caso, por ejemplo, de la incidencia de muerte que actualmente existe ante las personas que se realizan selfies extremos.

Nuestra fuerte dependencia de las redes sociales, supone que muchas personas deseen impresionar a sus seguidores con una foto que les quite el aliento, siento esta, en muchos casos, realizada en un lugar peligroso o a una altura inadecuada. Este efecto es aún mayor en el caso de las personas influencers. Ya se conocen varios casos de influencers que han fallecido debido a esta causa, como es el caso de Sofia Cheung, la cual, cayó al agua mientras trataba de tomarse una foto en el borde de una cascada. Otro caso conocido es el de Gigi Wu, la cual murió congelada por realizarse una fotografía en bikini en un lugar gélido. Este tipo de accidentes suceden en mayor medida durante un viaje, en lugares turísticos donde muchas personas deciden hacerse fotos “interesantemente” peligrosas.


Me ha parecido idóneo destacar una de las últimas catástrofes que han sucedido y hablar sobre la necesidad que muchas personas tienen de realizarse una foto con el suceso dejando de lado el pensamiento de que su vida se encuentra en peligro.


Recordemos, por ejemplo, aquello que sucedió en el volcán de La Palma cuando este se mantuvo en estado de erupción. Un grupo de hombres se saltó el perímetro de seguridad de dicho volcán para poder tomarle una foto de cerca. Por otro lado, también se conoce que un barco hizo caso omiso a las advertencias de alerta y se acercó al volcán de Cumbre Vieja, y otro hombre se hizo pasar por periodista para poder acercarse al perímetro. Logró atravesar el perímetro y tocó una roca volcánica, por lo que, evidentemente, se quemó.


Como estos casos son un infringimiento de la ley, y ponen en peligro sus vidas además de las de los cuerpos de seguridad y rescate que han debido acudir en su ayuda, son considerados delitos de desobediencia, lo cual tendrá como consecuencia una multa. 



Además de estos terribles accidentes, nos enfrentamos a un gran problema de autoestima social, dado que una de cada diez personas que recurren a la cirugía estética lo hacen porque no son capaces de verse bien a la hora de realizarse autorretratos con sus teléfonos móviles o debido a haber recibido comentarios negativos. 


Pienso que es prácticamente improbable que una persona que haya recurrido a la cirugía estética no tenga problemas con su imagen corporal a nivel emocional. Quiero decir, siento que muchas personas tienen en sus mentes la idea de que no son atractivos y por muchas operaciones estéticas que se realicen o por mucho que se maquillen o demás, no van a lograr quererse, puesto que realmente no es una cuestión física, sino que es mental. Al final, tiene un efecto semejante al de la anorexia o bulimia, sientes que no encajas en el prototipo social, y por muchos cambios (nocivos para tu salud) que experimente tu cuerpo, nunca terminas por verte bien. Entonces, ¿no sería ideal que el dinero que es invertido en la realización de operaciones estéticas fuese destinado a recibir ayuda psicológica, con el fin de ayudarte con esta cuestión de autoestima?


Si la ayuda psicológica estuviese más visibilizada o fuese más sencillo acceder a ella, estoy segura de que serían muchas menos las personas que deciden realizarse operaciones estéticas, pienso que recurrir a ellas es una manera de rendirte y de admitir que no cuentas con una sólida autoestima.

Totalmente relacionado a esto se halla el uso de filtros en los selfis, existen gran número de personas que no son capaces de hacerse una foto si no es con un filtro. De hecho, conozco a personas a las que les sucede. Yo, cuando siento que no me veo bien en las fotos a no ser que de uso a un filtro, pienso en lo siguiente: muchas veces, te ves bien en el espejo de tu casa y decides hacerte una foto. Cuando miras las fotos, ves que no sales tan bien como tú te veías en el reflejo de tu espejo. Entonces debes pensar que una fotografía no recalca fielmente la realidad, y que es normal que no siempre te veas bien a la hora de hacerte una foto. Las cámaras de los teléfonos utilizan objetivos con grandes angulares, lo que se traduce en que, en los primeros planos, las imágenes se distorsionan, además de que en ocasiones permanecen presentes en la imagen sombras indeseadas.


Pienso que una persona que está pasando por una temporada en la que no se ve bien en sus selfies, a no ser que de uso a filtros, lo que necesita es permanecer durante varios días sin realizarse fotografías, y observarse solo en el espejo, o incluso si lo necesita, tratar de no analizar demasiado sus facciones frente al espejo, puesto que, si tu relación con tu cuerpo o tu rostro es negativa, no harás más que visualizar defectos cuando te mires en el espejo.


He podido analizar también, gracias a una página web, que los filtros que imitan la cirugía estética serán retirados de Instagram para que no tenga efectos negativos en la salud mental de la sociedad, como aquellos que aumentan el grosor de tus labio y pómulos o afinan en mayor medida tus rasgos faciales.

Un hombre llamado Daniel Mooney ha creado un efecto en esta misma red social que muestra el aspecto que tiene un rostro durante el proceso de las operaciones estéticas, el cual está compuesto por hematomas, con la finalidad de romper con la idealización de las operaciones estéticas que se encuentra vigente en la sociedad actual. 

Personalmente, no estoy tan segura de que a las redes sociales les resulte rentable eliminar este tipo de filtros, puesto que generan adicción, y con ello más tiempo que las personas nos mantenemos navegando por la red, lo cual resulta beneficioso para ellos.

Además, otro efecto negativo sobre la sociedad es el hecho de que la mayor parte de influencers se han realizado alguna operación estética, y en ocasiones, ni siquiera admiten que se la han realizado, por lo que aumenta el sentimiento de baja autoestima al sentir que sus perfectas facciones son algo real que tu no tienes. Además, hemos de recordar que el canon de belleza actual solamente puede ser alcanzado si te sometes a una operación estética.


Además, esto es algo que sucede más en el caso de las mujeres que en el de los hombres, porque desde que somos pequeñas se nos educa bajo ciertos estigmas de cómo debemos comportarnos, cómo debemos vestir, cómo debemos mostrarnos a la sociedad, etc., por lo que es inevitable que, incluso aquellas mujeres que somos totalmente conscientes de que no debemos enjuiciar nuestros propios cuerpos, lo hacemos de modo involuntario. 


  • Bibliografía:


Bautista, L. (2021, 20 octubre). A la caza del mejor selfie: Turistas alardean de saltarse la seguridad del volcán de La Palma en Instagram. abc. https://www.abc.es/espana/canarias/abci-caza-mejor-selfie-turistas-alardean-saltarse-seguridad-volcan-palma-instagram-202110200849_noticia.html

I. (2018, 22 marzo). Selfies y comentarios en redes sociales responsables de un 10% de las operaciones de cirugía estética. iSanidad. https://isanidad.com/107195/selfies-y-comentarios-en-redes-sociales-responsables-de-un-10-de-las-operaciones-de-cirugia-estetica/?doing_wp_cron=1678351158.8830618858337402343750


País, E. E. (2019, 29 octubre). Instagram retirará los filtros que imitan cirugía estética por su efecto en la salud mental. Verne. https://verne.elpais.com/verne/2019/10/29/articulo/1572365190_784620.html


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